Que pereza dejar la zona de confort, ¿verdad?… ¡Con lo bien que se está en ella! Ese pensamiento sería cierto sino nos hiciera tanto mal permanecer en ella. ¿No me crees? En las próximas líneas, te contaré lo peligroso que es mantenerse en la zona de confort.
Pero antes debes saber que es la Zona de Confort, y para eso te voy a evitar ir hasta el navegador, según Wikipedia: “La zona de confort designa un estado mental en que el individuo permanece pasivo ante los sucesos que experimenta a lo largo de su vida, desarrollando una rutina sin sobresaltos ni riesgos, pero también sin incentivos.
Podría decirse que se trata de una zona en la que controlas todo lo que ocurre a tu alrededor, te sientes seguro, y conoces todos los movimientos a futuros que podrían efectuarse. Y es que la zona de confort puede presentarse de muchas formas, que a veces no logramos identificar, puede ser ese sillón que tanto te gusta, esa serie en la que estas enganchadisìmo, tu pareja, tu empleo, estudios, vida personal, etc…
Seguro estás pensando, esto suena genial, ¿qué puede tener de malo? pues no te dejes engañar, la zona de confort tiene un lado oculto que la convierte en algo peligroso: • Es aburrida. • No te fija una meta. • Está llena de pensamientos negativos, fracasos, miedos. Por eso es importante analizar si estamos dentro de una zona de confort, que nos esta absorbiendo sin darnos cuenta.
Pero, sobre todo, en ella se encuentra uno de los peores males, esto es EL CONFORMISMO. Y sin la intención de salirme del tema de la zona de confort, vamos hablar del conformismo, que al parecer van de la mano cuando hablamos de lo otro, y es que si bien es cierto, cuando estamos en un ambiente en el que somos los absolutos reyes de nuestros pensamientos, y acciones, no podemos ver más allá de lo que podríamos hacer si dejamos esta zona, y allí es donde ataca el conformismo, haciéndonos pensar que no necesitamos nada más de lo que ya poseemos, y es tan peligroso, porque nos roba la necesidad de emprender nuevos proyectos, fijarnos metas, de crear cosas que sin duda están en nuestra mente esperando ser ejecutados, pero no nos deja desarrollarlas, hasta que tomemos la decisión de liberarnos de esta zona que nos tiene prisioneros, de una falsa satisfacción que nos daña.
Cómo Salir de la Zona de Confort
Una vez que te has quitado la venda de los ojos, y has visto que esa zona tan confortable en la que te encuentras podría ser tu peor enemiga, llega el momento de ponerse manos a la obra, y preparar un plan para escapar de la zona de confort. Para eso es muy importante que estés consiente que ya no quieres tener ese tipo de vida, esa rutinaria forma de hacer tus días, y que necesitas un cambio, fijarse nuevas actividades, examinar lo de siempre, y organizar tus acciones, y aunque no es nada fácil como aparenta, tampoco es imposible lograr escapar.
Seguramente el primer día que tomes la iniciativa, será el día que más difícil sea para ti, y pues sencillamente así será, te lo digo por experiencia propia, déjame contarte breve-mente mi historia, hace ya un tiempo atrás, tenia el buen habito de hacer ejercicio por la mañana, cuidaba mi alimentación, corría por las mañanas, y extensas sesiones de abdominales, a veces creo que era hasta mas de lo que podría permitirme, y por su puesto los resultados eran excelente cada día, pero ¿qué paso?, me confié y silenciosamente entre en la zona de confort, la cual me atrapo, y me hizo pensar que ya había trabajado mucho en mi cuerpo, y necesitaba descansar un poco, cada mañana encontraba mejor quedarme en la cama, desayunar lo que se me venia a la mente, y así fue como todo lo que había logrado desapareció por completo, quedando con el conforme recuerdo que un día tuve una vida activa.
Así es como te engaña el confort. Y con esto no quiero decir que el confort sea malo, todo depende del tipo de zona de confort en la que te encuentres, por eso tienes que tener cuidado, al elegir una zona de confort, porque puedes estar dentro de una, y precisamente no tiene que ser peligrosa, al contrario, podemos acogernos a una en la cual hagamos cosas productivas para nosotros mismos, y porque no para los que nos rodean.
Ahora estoy fuera de esa zona de confort, que me mantuvo atrapada por algunos meses, pero déjame decirte que si podemos lograrlo. Por eso te dejo los pasos que me sirvieron a mí.
• Empieza Poco a Poco. El primer paso, como antes te dije será el que mas te va a costar, pero no pasa nada aquí un día vas a querer hacer lo que te has propuesto, y al segundo quizás ya no estés tan animado en hacerlo, pero no esta mal porque así es el proceso, paso a paso, hasta conseguirlo.
• Cambia tu Mente. Recuerda que todo esto solo empieza en un lugar, en el cerebro es el quien crea todo el asunto de la zona de confort, sus pensamientos que luego nos llevan a hacer sentir que merecemos estar así. Para eso debes tener claro que, lo que ahora enfrentes no serán fracasos, serán retos, los cuales puedes superarlos, separa el miedo, temor, todo aquello que asocies con el negativismo, alimenta tu mente con recursos que te van ayudar a cambiar tu pensamiento, lo cual se reflejara en tus acciones.
• Busca Formación si es Necesario. Pero al salir entras en lo que se conoce como zona de aprendizaje. Un lugar en el que todo es nuevo, y si lo aprovechas bien, adquirirás muchos conocimientos que luego podrás volcar en tu vida personal, o laboral, (en Internet hay material de sobra) u optar por cursos, charlas, conferencias.
El plan de estos puntos, es encontrar una nueva actividad en la cual puedas desarrollar nuevas cosas, con las que te sientas satisfecho, y sobre todo feliz de lo que estas logrando. Seguro vas a encontrar una actividad con la que te vas a identificar, y cuanta más ganas le eches, mas pronto te encontraras apasionado por lo que estas haciendo, y así le habrás dicho adiós a la zona de confort tóxica, y ahora estarás en una zona que te hace capaz de lograr lo que antes no creías ni merecer.
Todo es posible si te lo propones, y cuando creas que es demasiado para ti, pregúntate ¿podre con eso? ¡Y por favor que la respuesta sea un SI! Claro que puedo.
Si estas pasando por algo como esto, algo que te tiene sumergido en un mundo, en el que crees que no encuentras nada para ti, y no te hayas a gusto con nada, te sugiero buscar ayuda profesional, a veces es requerido.
Pero recuerda que somos dueños de nuestros pensamientos, que nuestro cerebro acata las ordenes que nosotros le damos. Puedes ser libre 🙂